Un tesoro culinario que une a las familias en El Palmar Quetzaltenango.
Introducción: El Palmar Quetzaltenango, un lugar rico en costumbres y tradiciones, cuenta con una joya culinaria llamada "el Caldillo". Este platillo tradicional, que ha sido cocinado desde tiempos remotos en el antiguo poblado, es apreciado por los palmarenses y se ha convertido en una parte integral de sus festividades y celebraciones.
El Caldillo es un testimonio vivo de la identidad y la cultura del pueblo palmarense, y su sabor exquisito es capaz de unir a las familias en torno a una mesa llena de historia y tradición.
Un manjar para ocasiones especiales:
El Caldillo es un platillo reservado para días festivos, cumpleaños, bodas y otras celebraciones importantes en El Palmar Quetzaltenango. Es preparado con esmero por las familias Palmarenses, quienes se enorgullecen de preservar esta receta transmitida de generación en generación. Este plato, acompañado de arroz y los tradicionales tamalitos, es servido a los invitados como un regalo culinario que refleja el amor y la hospitalidad del pueblo Palmarense.
Ingredientes y preparación: El Caldillo se elabora con una combinación de ingredientes simples pero sabrosos. La receta incluye Wiskil, papa, repollo, zanahoria y carne de res, así como condimentos como hachote, comino y pimienta. La proporción de cada condimento varía según la cantidad que se desee cocinar. La carne se marina durante toda una noche para luego cocinarla y agregar las verduras, las cuales se cocinan rapidamente. Tradicionalmente, este platillo se prepara en utensilios de barro o apaste, aunque también se pueden utilizar otros utensilios.
Una tradición en la fiesta patronal: Durante la fiesta patronal, el Caldillo no puede faltar en la iglesia católica local. Después de la misa, este platillo tradicional se ofrece al público a precios económicos.
Es una oportunidad para que los visitantes y lugareseños disfruten juntos de esta delicia culinaria que forma parte de la herencia cultural del pueblo palmarense. En algunos hogares, el Caldillo se acompaña con chile jalapeño en escabeche, cerveza bien fría o una copita de licor, añadiendo un toque de picante y frescura a la experiencia gastronómica.
Una presentación especial: El Caldillo se sirve en escudillas de barro, bien caliente. La elección de este tipo de vajilla tradicional resalta la autenticidad y el arraigo de la receta en la cultura local. Al degustar este platillo, los comensales pueden sumergirse en una experiencia culinaria única, saboreando la conexión entre el pasado y el presente, y sintiendo cómo el Caldillo une a las familias en torno a la mesa.
Conservando la identidad cultural: El Caldillo es mucho más que un plato típico para los palmarenses; representa la importancia de conservar y mostrar la identidad y la cultura del pueblo.
Redaccion: Alvaro Rojas Melendez.
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