"Viernes Santo: Baño Prohibido, Pescado Garantizado". cuento

Juanito creyendo convertirse en pez.

Esta es la historia de Juanito, quien vivía en la comunidad donde antaño se asentó El Palmar, en Quetzaltenango· Habitaba en una casa humilde, de mitad block y mitad madera, con un techo de lámina· 

Compartía este hogar con su madre, Doña Maruca, una mujer profundamente religiosa que velaba para que a Juanito no le faltara nada·

El canto de las chicharras anunciaba la proximidad de la Semana Santa· Doña Maruca solía hornear pan para estas fechas y preparaba una comida especial el Jueves Santo para intercambiar con sus vecinos, como era tradición·

No obstante, siempre le recordaba a Juanito que el sábado era el día ideal para ir a nadar a las pozas del río Nima Uno, pero que el viernes estaba prohibido, siendo este un día de duelo y recogimiento por la muerte de Jesús·

Doña maruca repartiendo pan y alimento

Según la creencia popular, bañarse en el río el Viernes Santo acarreaba un castigo: convertirse en pez· Esta advertencia alejó a Juanito del río por algunos años, pero su curiosidad eventualmente lo llevó a desafiar la superstición·

 Decidió poner a prueba la leyenda junto a unos amigos, y se sumergieron en una poza cercana del río Nima Uno·

Todo transcurría con normalidad, pero después de varias horas en el agua, los dedos de Juanito comenzaron a deformarse, su piel se tornó arrugada

 y empezó a sentirse mal· Imaginaba horrorizado cómo se convertía en pez, lamentando no haber escuchado a su madre·

 Sin embargo, al salir del agua unas horas más tarde, su cuerpo volvió a la normalidad· 

Fue entonces cuando Juanito comprendió el verdadero significado de no bañarse en Viernes Santo: no se trataba de una transformación literal, sino de la importancia de respetar la solemnidad de la fecha·

Desde aquel día, la frase "si te bañas en Viernes Santo te convertirás en pescado" se transmitió de generación en generación, recordando a todos que algunas tradiciones llevan consigo lecciones profundas sobre respeto y reflexión.

Autor: Alvaro Rojas Melendez.